lunes, 20 de agosto de 2007

Cinco relatos que huelen a tierra viva y raíces

Comentario de Alba Omil sobre el libro El guardián del último fuego y otras leyendas argentinas, de Cristina Bajo (Buenos Aires: La brujita de papel, 2007). Publicado en el diario La Gaceta de Tucumán, el día 19 de agosto de 2007. El enlace a la nota es:

http://www.lagaceta.com.ar/vernota.asp?id_seccion=109&id_nota=231192

jueves, 16 de agosto de 2007

Fantasmas


-I-


Muchas noches me desvelo por culpa de esta gata: corre, salta, bufa, se dispara sí misma como un proyectil, y así, jauja hasta la madrugada. De día, duerme; yo, uncida al yugo como un buey. Ya no sé qué hacer
-¿Ratones?
-No, los fantasmas.


-II-

El juego de las escondidas


A algunos los detesta y no los deja participar; con los otros, se divierte: la mancha, las escondidas, el juego de las estatuas.
Una noche me puse a observarlos: pequeños ectoplasmas informes y lechosos -fantasmas de gatos, quizás; o de perros, tal vez- que desaparecían y reaparecían instantánea y mágicamente en el proceso del juego.
-Los fantasmas, por supuesto, pero ¿y la gata?
-La gata también.
-Pero ¿tienes gata ?
- No, es un fantasma.

Alba Omil

Extraído del libro Con Fondo de Jazz, microrrelatos, de Alba Omil. Ediciones del Rectorado, Universidad Nacional de Tucumán, Tucumán, Argentina, 1998

jueves, 9 de agosto de 2007

Ana María Mopty: Con Abrazos


Ilustración de tapa del libro Con abrazos, realizada por Susana Babot
El microrrelato es un signo estético complejo, difícilmente catalogable: transita del mundo narrativo al lírico, recibe aportes de la música, de la plástica, de la filosofía ¿Cómo diseñar un modelo textual? ¿Cómo analizar sus estratos y sus formantes? ¿Cuál es su modalización narrativa? ¿Cómo se perfilan sus sistemas simbólicos? Preguntas éstas de no fácil respuesta pero que pueden esclarecerse algo a la luz de trabajos como el que hoy nos ocupa.
El mundo que edifica Ana María Mopty en sus creaciones, está caballo entre la realidad cotidiana y el territorio de las ensoñaciones.
La ensoñación tiene una potencialidad admirable; para empezar, en su semipenumbra pueden distinguirse objetos, situaciones, otros elementos, que en la realidad objetiva no se ven, o no aparecen, y que están revestidos, o revistiendo, dentro de una variedad de registros, en un determinado modelo textual- el universo representado en ese campo pequeño y hondo que es el microrrelato.
Para algunos autores, el microrrelato puede ser una diversión, o un juego, o una catarsis, o cuántas cosas más.
Para Ana María Mopty es, sobre todo, una búsqueda, una indagación y un tránsito. A veces no resulta fácil seguirla –tanto la hondura como la altura suelen producir vértigo y miedo- pero ella no hace concesiones al lector, dice lo que siente. Si encuentra respuesta, bien; si no… Pero tampoco ignora al lector; para él están destinados los indicadores: vectores que parten del título; palabras claves, acentos invisibles, en fin.
Veamos el diseño estructural y qué notas de referencialidad aporta. En ese orden de cosas, el título –manejado con mucha reflexión por Mopty- es no sólo símbolo alusivo sino que está explicitando el motivo temático. Ese motivo tiene sus envolturas y una leve urdimbre que lo sustenta: alusiones espaciales o temporales, o factuales (algún acontecimiento, algún hecho, algún acto) o relativas a la propia experiencia (reflexiones existenciales, estados emocionales, afectivos, anímicos) [...]


Alba Omil

Extraído del Prólogo del libro Con abrazos (microrrelatos), de Ana María Mopty de Kiorcheff. Lucio Piérola Ediciones, Tucumán, Argentina, 2007.